viernes, 14 de agosto de 2009

RODOLFO SERRANO
















ODIO




Me dicen que me odias.


Que maldices


las letras de mi nombre.


Y el instante


en que buscaste en mi cuerpo los espejos


donde encontrar la angustia de tus noches.




Y aseguras que nunca he asumido


que el beso es un relámpago


Y que hasta los amores,


los más bellos,


vienen con fecha


de caducidad perfectamente impresa.




Y no sé qué decir.


Aún, de madrugada,


releo algún poema. Aquellos versos


que te pasaba bajo mano en las tabernas.


Bebo de alguna copa.


Lloro a solas.




Y, ¿sabes?, es verdad. Aunque lo niegue,


el amor sólo sirve para, a veces,


escribir un poema.


Y comprobar que el odio


es lo único que queda. Y vence siempre


a ese amor que creímos


eterno en los días claros.




Mas yo bendigo, feliz, te lo confieso


ese odio, amor mío,


que a mí me hace vivir en tu memoria.



Periodista, escritor y compositor de canciones.
Pero ante todo, poeta. Uno de los grandes.



Ha escrito:

Un oficio de fracasados

Un único crimen

La España de Cuéntame

Toda España era una carcel

Historias de Madrid


y los poemarios:

Especial para cócteles

Al oeste hay apaches

4 comentarios:

Joan Figueres i Guíxols dijo...

Me dejas de una pieza... hermosas palabras que se corresponden con esta agradable imagen...

pennylanebcn dijo...

Deberías leer sus dos poemarios. Es difícil describir la emoción y la sensibilidad que transmiten.

Gracias por tu visita y hasta pronto, espero!

Joan Figueres i Guíxols dijo...

Sencillamente excepcional!!!

Joan Figueres i Guíxols dijo...

Un abrazo, y gracias...